Categoría: "CONTEMOS CUENTOS 2"

Lo conseguí. De Extasiada

Tengo un gran solar en el estómago, ya me decía mi abuela que en paz descanse, que esto no era para mí, pero yo no la hice caso, yo empeñada como estaba en continuar, en hacer ver a todo el mundo que lo tenía todo bajo control pero... ¿realmente le importaba a alguien si lo dominaba o no? Ahora comprendo que no, ahora estoy segura de que lo único que les importaba a los que andaban a mi alrededor, eran ellos mismos.
Tanto énfasis ponía en demostrarles, que me olvidé que solo había una persona que realmente no se lo creía.
Este maldito temperamento mío no me dejaba reconocer mi gran error, y eso que me provocó noches enteras de insomnio en las que bien podía haberme parado a pensar un poco, pero he de reconocer que cuando aquel elixir, oscuro cual noche cerrada, se iba vertiendo en el vaso, poco me importaba si salía de botella o directamente del matraz donde se engendró, lo único que me llenaba el alma, era poder apreciar su aroma, observar su burbujeante chapoteo al ser vertido y desde ese mismo instante, poco me importaba si dañaba o no a mis seres queridos, si les hacía soportar mi retahíla de chistes malos, o de cualquier otra anécdota que mi sistema nervioso rebuscase en el baúl del recuerdo, nada me importaba si pasaba las noches en vela, desvelando en mi caminar a mi cabreado padre que no veía la forma de poder ir descansado al trabajo.
Han transcurrido cuarenta y ocho horas, veinte minutos y los segundos no me da tiempo a contarlos y escribirlos a la par, siento que algo en mí se descompone, que por dentro me voy rompiendo cual muñeca de cartón bajo un aguacero, todo mi cuerpo se revela ante la carencia de esa fabulosa bebida que tanto llenó mis días, y no puedo olvidarla, todo me lo recuerda, no hay película en la que no vea su textura, no hay bar en el que no se aprecie su aroma .
Se ha terminado, ya no deseo beberte, ya no deseo tenerte dentro de mi pero ¿que veo? Mi hermano va a caer, ¿como lo consiguió? Salgo corriendo, y llego a tiempo, de un manotazo impido que un ser inocente caiga en las redes de COCA-COLA.

Extasiada 10/03/2006

Lo necesito. De Suprunaman

Por las mañanas siempre se irrita, así es su temperamento natural hasta que toma su dosis.
Hierve el caldo como si se hubiese prendido con un rayo solar, alta se alza la llama que entra en un remolino de tintineos constantes, el fuego va perdiendo su intensidad, su énfasis.
Top, top, top, top, gota a gota se va llenando el matraz con el líquido negruzco, espeso pero liviano como una pluma que flota en un estanque.
El tipo casi está babeando cuando ve que el ansiado elixir pasa por delante de sus narices, pero no es para él, tendrá que esperar un poco más, eufórico y nervioso se levanta del taburete y dice

Manolo, necesito el carajillo ya, ya, ya.

Suprunaman 09/03/2006

Intentando ser Dios. De Monelle

Volcaba su temperamento al completo en sus obsesiones, de ahí que, aquello que no tuviera que ver con ellas, le resultara indiferente, incluso le molestara.
Cada día, encaminaba sus pasos hacia el sótano, lugar en el que tenía dispuesto su laboratorio, la catedral de sus creencias.
Dicen que, cierto día, mientras paseaba por el campo, le alcanzó un rayo. Gracias a su formación científica aquel suceso fue la base sobre la que desarrolló la teoría, que se empeñaba en demostrar con verdadero énfasis.
No le preocupaba que otros, antes que él, hubieran conseguido algún logro en la misma materia pues ninguna evidencia escrita lo corroboraba.
Se creía poseedor de las claves que le harían merecedor del éxito. Había sufrido en sus propias carnes los avatares de sus descubrimientos, y se preparaba para el experimento final que le llenaría de gloria, elevándolo hasta lo más alto de la ciencia en dónde quedaría grabado su nombre con letras de oro.

Esperó pacientemente a que todo el mundo se retirara. Sus sirvientes estaban acostumbrados a un comportamiento esquivo e impregnado de misterio. Llevaba varios días vagando de un rincón a otro, enfrascado entre manuscritos y libros, refunfuñando y sin apenas probar bocado ni dormir.
Bien de madrugada, partió a solas en dirección al solar en donde, años atrás, fuera alcanzado por el rayo para escarbar en el lugar exacto de aquel suceso.
De las entrañas de la tierra, se había propuesto rescatar el último ingrediente. Una vez con él entre sus manos regresó hasta el laboratorio para incorporarlo de inmediato a su experimento. El matraz contenía, según anotó concienzudamente en sus apuntes, la esencia vital, la sustancia madre que le proporcionaría, una vez disuelto el último ingrediente, el elixir de la vida con el que alimentar al fruto de su investigación: el primer homúnculo en la historia de la ciencia llevado a la vida.

Cuando lo encontraron tenía en el rostro un gesto de complacencia, que fue interpretado como la aceptación de su propia muerte. Las horas que trascurrieron, después de que aquello sucediera, habían servido para dar al traste con todos sus esfuerzos, es más, nadie pudo interpretar sus intenciones y todo fue destruido antes incluso de que su cuerpo fuera enterrado.
La cripta familiar fue abierta para introducir su cuerpo. Del interior de su mano, fuertemente cerrada, nadie se atrevió a arrancar un pedazo de vidrio oscurecido aún manchado de barro.

Monelle/CRSignes 05/03/2006

Aventura en el Amazonas. De Belfas

El río a medida que avanzábamos se volvía mas rebelde, las rocas que se encontraban en medio del torrente entrañaban mucho peligro.
Gustavo con una naturalidad increíble, las iba esquivando con maestría, nunca había visto a nadie con semejante temperamento.
Atravesamos unos rápidos donde el corazón se revolucionaba al mismo compás que la barca, el bosque se volvía más denso y comenzaron a emerger del interior del bosque aves exóticas. Unas paredes de granito se alzaban frente a nosotros donde el cauce estrechaba su curso.
Tras cinco horas, Gustavo dirigió la nave hacia la orilla a un pequeño solar dentro del enmarañado bosque y nos comunicó, fin del trayecto.
Llamé a Gustavo y le ofrecí una compensación si nos adentraba por las puertas del infierno, terminó por claudicar, puso énfasis al repetir que no se hacia responsable de nada ni de nadie.
Los demás un poco reticentes aceptaron y tras un breve descanso continuamos el camino después de tomar de un recipiente de vidrio semejante a un matraz, un líquido repugnante.
El paisaje era espectacular, las paredes de granito, emergían del mismo río y se alzaban majestuosas en busca de las nubes, la niebla impregnaba el húmedo ambiente, la visión se tornaba cada vez mas confusa, y el miedo hizo acto de presencia. La corriente se hacia mas vertical y la velocidad de la barca se hizo incontrolable.
Miré a Gustavo, por primera vez vi en su rostro la preocupación, él intentaba ejercer control sobre aquella endeble chalupa en una desigual lucha contra las turbulentas aguas.
Un impacto súbito y la barca dio la vuelta, quedamos a merced de la corriente.
Me agarré con fuerza a la barca y logré ponerla en posición de navegación.
Subí a ella, nadie mas consiguió embarcar de nuevo, pasaron dos horas inciertas, vaivenes y golpeteos contra las rocas, después, un remanso. Estaba sólo, cuando todo lo creí perdido vi gente en la orilla, dirigí la barca hacia allí, cuando me encontraba próximo, un grupo de mujeres apuntaron sus arcos hacia mí, me puse de pie y con los brazos en cruz intente hacerles ver que iba desarmado. Un silbido, una flecha dirigida hacia mí, un golpe seco en mi pecho, un crujido de huesos, un calor abrasador y un flujo de mi sangre sobre mi camisa, fueron los indicadores que el elixir de la vida concluía.

Belfas 04/03/2006

El principio. De Aleisterdeleden

¡Las Brigadas Paranormales! Al, no pudo reprimir una sonrisa ante los recuerdos que evocaba ese nombre, mientras se encaminaba al despejado solar que antiguamente ocupaban las eras del pueblo abandonado. En ese mismo instante recordó algo que le pareció importante: el énfasis que puso su antagonista al hablarle indicaba claramente su ascendencia satánica, más bien luciferina. Había venido a La Estrella con una idea diametralmente opuesta a la que ahora tenía. Nadie, excepto el extraño personaje que le atacó, sabía de su presencia en el lugar.
Las Brigadas habían nacido allí, todos sus miembros fueron iniciados en este lugar. Cierto es que el programa de radio había ayudado, pero fue la magia del terreno la que los había seleccionado, todos pasaron alguna prueba, definieron allí sus cualidades y forjaron su temperamento. Y él quería que murieran –mágicamente hablando- en el mismo lugar, por ello iba a enterrar sus artes en el bosque, pero no le habían dejado. Tal vez lo lamenten, pensó.
Tomó de nuevo el paquete rasgado precipitadamente al extraer de él la espada, lo acabó de abrir, sacó el resto del “uniforme” y volvió a sonreír. Sintió, nuevamente, la sangre fluyendo con ritmo de rock… ¡Volvía a la lucha! Se puso el poncho negro, decorado según la tradición revelada en los grimorios —las túnicas resultaban incómodas y de movilidad reducida—; se ciñó el cinto, al que volvió a colgar la espada; se puso la boina guerrillera con el tetragrámaton en la parte frontal, a lo Che, y finalmente tomó de la parte posterior del coche los únicos objetos que había conservado: la vara (un bastón de avellano con una calavera en la empuñadura), el cáliz y su secreto más íntimo, su elixir. Nunca nadie de la tropa había osado a preguntarle por la composición de aquel extraño mejunje que siempre llevaba en un matraz aforado. Los más allegados sabían, eso sí, que lo tomaba antes de decisiones importantes que, como comandante del grupo, se esperaban de él. La tradición venía de antiguo y era especialmente efectivo en ayunas. Tomó un trago y apreció, como tantas veces, la sabiduría que encerraban sus dos componentes: aguardiente y vino moscatel. La “barretja” siempre había tenido ese propósito para los de su raza. Ahora podía pasar a la acción.

Aleisterdeleden 02/03/2006

Chissst casi na. De elgringo

Presuntuoso y fanfarrón,...chissst casi na..., así dicen que soy, ¿no será que me tienen envidia? Pues chicos... eso debe ser...digo yo, aunque creo que simplemente he nacido para triunfar, digamos que tengo estrella,...chissst casi na..., ¿cómo diría yo?¡Un elegido! Lo dicho, he nacido para triunfar, aun recuerdo aquel día en la universidad justo enfrente del tablón de anuncios, esa aglomeración de gente, y yo acercándome lentamente como si de una ceremonia se tratara, jajajaja… Todos se apartaron al verme llegar, y allí estaba, en papel verjurado la lista de los mejores estudiantes, y por supuesto yo el primero, no podía ser de otra manera, ...chissst casi na..., en ese momento supe que mi vida iba a ser un continuo orgasmo de éxito, donde sería imposible disociar la alegría de mi cuerpo, tal vez por mi idiosincrasia o tal vez por mi temperamento, no se la causa, pero tal fue mi énfasis y mi empeño por ser el mejor que el elixir del triunfo pronto recorrió por mis venas, ...chissst casi na...

Pero ¿qué se habrán creído? En las clases del profesor Perot, mientras ellos sólo pensaban en faldas, yo me centraba en las explicaciones del profe siempre con el matraz en la mano por si era menester, de ahí el resultado al final del trimestre, ...chissst casi na... Uuffff como pasan los años, con el titulo bajo el brazo y el solar que me regalaron mis padres fundé mi primer negocio, pronto el dorado llenó mis bolsillos, luego vino mi primer mercedes, aun lo recuerdo, tapicería de cuero beige y carrocería añil metalizado,...chissst casi na... Bueno, ya solo me falta una cosa, encontrar a alguien que me quiera,...chissst casi na...

Elgringo 03/02/2006

CUADRANTE 1548. De Mon.

1:43 de la madrugada
Cuadrante 1548 / 352º Centro de la Tierra. 28 de febrero de 2167

Hoy ha amanecido con menos polvo en suspensión, a través de la gruesa capa de contaminación se pueden entrever los rojizos rayos de sol que el astro padre nos continua mandando, cada vez con menos temperamento.

Como cada fin de mes, tocaba cambio de turno, solo los afortunados pueden bajar a beber el elixir que mana en el interior de nuestro planeta y así continuar la cura de desionización, lejos de las radiaciones dañinas que dominan nuestro cielo abierto.
La pequeña barca de polipropileno se acerca poco a poco al transportador, gigantesco ingenio que traslada una pequeña cápsula para 2 personas a varios cientos de kilómetros tierra adentro. Los científicos dispusieron todo su potencial para aplicar con énfasis todos los conocimientos de ingeniería y robótica que había en la época. El lugar elegido fue la fosa de las Marianas cuya profundidad ronda los once mil metros en pleno océano.

El viaje al centro de la tierra duraba apenas unos minutos, pero las diferentes fases de descompresión obligaban a los afortunados a realizar varias etapas de aclimatación, que a modo de visita guiada aprovechaban para recorrer las inmensas cavernas de vacío que el magma solidificado había dejado millones de años atrás. Eran como bóvedas que podían contener toda una ciudad como Paris, y por suelo, un pedregoso solar.

El viaje ha terminado, en la sala de revisiones médicas y control de acceso hay una fuerte seguridad, es necesario acreditar la identidad puesto que las reservas de medicamento sintetizado son mínimas. Al fin, en la acorazada sala platino se encuentra el matraz aforado que contiene la única dosis permitida por viaje y mes, solo su ingesta devolverá a la superficie a los pocos afortunados que cuentan con tan excelso privilegio.

Mientras, arriba es un día más que se sigue confundiendo con la noche.

Comandante Mon desde la sala ZX-10 para todos los calabaceros.

Mon 28/02/2006

Elixir. De Monelle

Era el mejor ejemplo para todas aquellas gentes perdidas ante la adversidad. Poner énfasis en sus palabras, destacar sus hechos, hubiera sido un error. Faltos estaban de un redentor, alguien que consiguiera encarrilar nuevamente su camino. Pero eso era algo que no iban a consentir.
Habían tardado mucho en lograr que el desencanto y la moralidad se derrumbasen, se apartasen de aquellas gentes para someterlos mediante las premisas que les favorecían y, el resurgimiento de aquella figura, desmoronaba sus planes.
En AP-58/34, más conocido con el sobrenombre de “Rudo-5”, uno más de los satélites empleados para la explotación minera, el desánimo había llegado a extremos de difícil arreglo. Los resquemores y miedos por la constante amenaza de la pérdida de la autonomía, debido a la escasez de recursos naturales como el agua, sucumbieron en disturbios y éstos, en una desesperanzada lucha de difícil solución.
Pero los dueños de las minas habían conseguido llegar a un acuerdo, tenían en sus manos la solución y no podían dejar que se les escapara. Así que, hicieron desaparecer toda prueba de la existencia de aquel individuo que, con su temperamento, hubiera logrado incluso convencer a más de uno de ellos. El diálogo y los razonamientos vencerían a la represión, y eso no podían consentirlo, pues si cedían, ¿qué nueva concesión les aguardaba?
Si aquellos habitantes querían milagros para mantener su fe, ellos se los proporcionarían.
Sobre un solar abandonado después de años de agotador expolio, hicieron surgir, ante los incrédulos ojos de algún incauto, un manantial de cristalinas aguas que no cesó de manar hasta crear un torrente, que discurrió formando un río que fue creciendo y creciendo.
No había mejor elixir para curarlos que aquel líquido y puro elemento.
No se preguntaron nada, tal era su entusiasmo; pero bajo aquella tierra se escondía un laboratorio en el que, desde un matraz, se creaba el elemento madre sutilmente mezclado con una sustancia de efecto sedante, que consiguió calmar los ánimos de todos los insurrectos, proporcionándoles un alto grado de docilidad y sometimiento sin que se dieran cuenta.
Y así continúa la vida en aquella lejana y diminuta mota de polvo en el espacio. En espera de que, quizás nuevamente, surja alguien que levante la voz por ellos y tenga mayor suerte.

Monelle/CRSignes 28/02/2006

Actores. De Extasiada

No, no y no.

El vocabulario empleado por el director, además de escaso casi siempre soez, hacía que los actores nos sumiéramos en una angustia constante.
Soy de temperamento tranquilo, y los gritos me nublan la gran paciencia que me suele caracterizar.
Estamos ensayando un gran musical, y vamos muy atrasados, por ese motivo el director, nos exige un mayor énfasis en lo que hacemos.
Miro a mí alrededor, y veo rostros decepcionados, agotados. Expresiones de desánimo y cuerpos medio deshechos en agotamiento.
Como elixir en matraz, nos mecemos a merced de la música sin ánimo ni esperanza de que salga bien.

Van pasando los días y cuanto más nos acercamos al día del estreno, más inquietos estamos, más caídas y empujones nos damos.

No, no y no, ¿os creéis que estáis bailando en vuestra casa? Esto, más que un teatro debería ser un solar, pues parecéis patos silvestres intentando bailar.

Compungidos y agotados, paseamos por el escenario esperando a que nos den las instrucciones para empezar de nuevo, ante nuestra sorpresa, el director, cogió su maletín y se fue.
Ahora sí que estábamos despistados, no sabíamos si irnos o quedarnos, cuando empezamos a escuchar la música.
Como marionetas, dirigidas por invisibles hilos, nuestros ahora relajados cuerpos, se empezaron a mover, todos retomamos nuestras posiciones y comenzamos el baile, pro esta vez sin presiones, solo por divertirnos, como niños pequeños en el patio del colegio, unas tras otras todas las escenas se fueron realizando con la mayor de las solturas.
Tras una hora sin descanso, la música terminó, todos nos quedamos paralizados, con nuestra respiración entrecortada, mirándonos de reojo sin saber muy bien que hacer , cuando de la cabina de los músicos un sonoro aplauso llegó a nosotros y una voz por todos ya conocida se esparció por la sala.

No, no, y no. No dejéis de portaros como lo que sois, unos grandes actores y todo saldrá como ahora. PERFECTO

Extasiada 28/02/2006

El membrillo. De elgringo

Estúpido, tonto, cobarde, “perót”. No sé por cuál de ellos decidirme,
“Tonto l’haba”, membrillo, “megarpendio”... Es que... hay tantos. “Acojonáo”,
“palurdo”... ¡Aahhhh! Da igual, el que sea, al fin y al cabo me siento igual
de insignificante con unos que con otros. Vamos, como una gotita en el fondo de un matraz, atrapado y sin poder salir, pero ¿quién soy yo? nada, eso es lo que soy:
una cucaracha corriendo entre miles de piernas preguntándose cuál de ella le aplastará.
He llegado a pensar que no debería haber nacido, por dios, con el temperamento que tienen mis hermanos y yo parezco una ursulina, y van ya dos años,¿cuándo me decidiré? Si sólo el verla me hiela la sangre. Por las noches ensayo delante del espejo una y otra vez todo lo que quiero decirle, si bien es cierto que le pongo tanto énfasis que acabo con un dolor de cabeza terrible, pero hoy a ocurrido algo especial, hoy es de esos días que no se deberían de acabar. Hoy el sol brilla más que nunca, es diferente, veo las cosas con más optimismo. Cuando desayunaba, como si de un elixir se tratase, se han despejado mis miedos, hoy será mi día, recorreré los escasos metros del solar que separan mi casa de la suya, llamaré al timbre, y cuando salga se lo soltaré a bocajarro: “¡Devuélveme el disco de Peret que te dejé hace dos años!”

Elgringo 28/02/2006

Palabras para el "Contemos cuentos 2"

ELIXIR

ÉNFASIS

MATRAZ

SOLAR

TEMPERAMENTO

Cinco palabras con la que pasábamos de un mínimo de 100 palabras, para los textos, a 200. El máximo no ha variado aún. El resultado: 10 relatos que encontraréis a partir de aquí.