Ausencia. De Crayola
Por monelle elMar 25, 2013 | EnCrayola, CONTEMOS CUENTOS 31
El cariz en tus ojos cambió. Tu mirada se volvió indiferente. Pero no me di cuenta cuando paso. Y los besos se escondieron de los labios, y tampoco me di cuenta. Me ocupé tanto de ti que me olvidé de mí. Por estar pendiente de que me amaras, me olvidé de amarte. Por vigilar tus pasos, me olvidé de acompañarte. Y te até al pie de mi cama sin ver que la que no estaba era yo. Te poseí tanto que me quedé sin nada cuando te fuiste porque me llevaste contigo. Tal vez me pegué a tu piel, o tal vez solo me aferré a tus pies para no dejarte ir. El armario aún guarda tus camisas. Las sábanas aún tienen tu olor y tu humedad. El libro en el buró sigue esperando a que lo abras y lo leas. No sabe que te fuiste y lo dejaste esperando en la misma página. Tu taza sigue en el mismo lugar, todavía tiene un sorbo de café con miel sin sabor. El último que dejaste sin tomar. La casa está llena de ti. De todo lo que se quedó sin terminar. Inhóspita y sola. Las horas van y vienen errantes sin destino. El reloj de la sala se detuvo al momento en que saliste, cree que volverás. Te espera. Yo no te espero, solo te extraño. Todavía no se que hacer con tanto espacio vacío. He buscado en mi cama los restos de tus recuerdos pecaminosos porque me haces necesitarte en el cuerpo, y en el alma, y en mi vida. Pero te fuiste y solo te puedo extrañar.
Crayola 20/04/2007
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